La andadura de la Farmacia “La Vieja” comienza en 1948, hace ya 75 años, después de que Don Manuel González Rosales, abuelo de una de los actuales titulares, de la ciudad grancanaria de Arucas, finalizase sus estudios en la Universidad de Granada.
En aquel momento le surgió la oportunidad de abrir la primera botica -antigua denominación de las oficinas de farmacia- en la isla de Fuerteventura, la isla más larga y más cercana a África de las ocho Islas Canarias.
Cuando en 1948 Don Manuel estableció su farmacia, en el centro neurálgico de la capital, entonces denominada Puerto Cabras, se ubicaba en el mismo lugar donde actualmente la regentan Bruno Márquez Rodríguez y Olga Hortensia González Felipe, en la esquina de la Calle Primero de Mayo con la Avenida León y Castillo; cercana a la Iglesia y al Ayuntamiento, el centro de la vida del pueblo.
Al tiempo de la primera instalación de la farmacia únicamente dos médicos pasaban consulta en Fuerteventura, Don Gerardo Bustos y Cobos, desde 1930, y Don José María Peña Yáñez, quien llegaría a la isla en 1944.
Don Manuel y la eterna sonrisa de doña Hortensia. (Archivo fotográfico familiar)
Con éste último, Don Manuel González Rosales recorrería la isla, con un pequeño maletín con los principales medicamentos y productos farmacológicos, de pueblo en pueblo, en el pequeño automóvil del que disponía el reputado médico. El Señor Peña revisaba a los pacientes y Don Manuel les dispensaba la solución necesaria.
Junto a ello, y pese a que ciertamente doña Hortensia Pérez Pérez, esposa del boticario, no había estudiado la carrera de farmacia, lo cierto es que, en el buen hacer del matrimonio, Doña Hortensia ayudaba recurrentemente a su marido en el despacho diario de la farmacia; llegando incluso, muchas veces, a ser denominada «la farmacia de Doña Hortensia».
Aunque con el paso del tiempo y el crecimiento de la población en la isla, derivado principalmente del auge del turismo, se fueron instalando en la antigua Herbania (denominación aborigen de Fuerteventura) más farmacéuticos, lo cierto es que toda la isla pero, en especial, los vecinos de Puerto del Rosario le guardaban especial cariño y confianza a la primera farmacia, denominándola cariñosamente como «La Vieja», de cuyo apodo viene actualmente su nombre oficial Farmacia «La Vieja» adoptado por los actuales titulares.
Ese mismo cariño es el que le guarda todo el equipo de la Farmacia «La Vieja» a la ciudad que vio crecer a este servicio público, intentando brindar desde un inicio y hasta el día de hoy, la mejor de las alternativas en el servicio sanitario que suponen los establecimientos farmacéuticos. Por ello, la relación entre los vecinos de Puerto del Rosario y la farmacia ha sido siempre el motor para seguir adelante con nuestro trabajo, orgullosos siempre de ser la farmacia vieja.
Así, de Don Manuel González Rosales pasó a su hijo, Don Manuel Agustín González Pérez, quien llevó la farmacia hasta 2006, cuando tomaron las riendas de la botica los actuales titulares: Olga Hortensia González Felipe y Bruno Márquez Rodríguez; conformando, hasta la actualidad, tres generaciones de farmacéuticos dedicados al servicio de Puerto del Rosario.